El alcalde de Granada, Juan Carlos Mendoza, anunció que el municipio está en alerta máxima, y los organismos de socorro se encuentran atentos ante las constantes crecientes del Río Ariari, el cual se ha arrastrado dos viviendas en el sector de Puerto Caldas, en el punto conocido como la «Caseta Picapiedra» donde habitan cerca de 60 familias.
«Estamos realmente preocupados por esta situación, ya estamos adelantando los informes, y censos pertinentes, no solo de viviendas, y personas damnificadas, sino también de cultivos e infraestructura que se ha visto averiada, tenemos una situación crítica con el Caño Irichare, el cual amenaza con tumbar cerca de cuatro puentes en Jurisdicción del municipio de Granada, dejando a la gente aislada…», así lo explicó Mendoza.
La situación sería muy delicada sí el agua arrasa con estos puentes, puesto que éstos comunican con las veredas y sectores más alejados del municipio, por ello, el Alcalde de Granada define esta emergencia como crítica. «Esperamos que por medio del Comité se active la calamidad pública, y reportar al Departamento, para que así adelante lo pertinente», afirmó.
Según reportes de medios locales a la emergencia, el secretario de Planeación Ambiental y Vivienda de Castilla La Nueva, Hernando Rodríguez, anunció que ya se encuentran 10 familias en el Centro de Acopio de este municipio, rescatadas en días anteriores de la ola invernal que azota esta zona del Meta. Se suma a la afectación de 35 familias que viven en zonas ribereñas
En este municipio hay preocupación por un camino que queda en una vereda limítrofe llamada San Agustín, debido a que existe el riesgo de que colapse el Puente Hormiga, el cual permite el paso de personas y motocicletas, y a la vez, es el que sostiene la red de acueducto que va de Guamal a Castilla La Nueva. Adicional a ello, también está sujetando el tubo que lleva el gas a este último municipio. Por ello, autoridades están atentos ante lo que pueda sucede con esta infraestructura.
Por otro lado, Guamal desde las primeras horas de la mañana de hoy se quedó sin suministro de agua potable, por daños en su red de acueducto, declarándose una emergencia sin noticias de cómo ni a qué tiempo se pueda restablecer el servicio.
Se recomienda a los habitantes de este municipio recoger aguas lluvias, aprovechándolas para suplir en parte la demanda de este líquido preciado en algunos usos diarios prioritarios, aclarando que no es recomendable consumirla para alimentación.