La Analítica Avanzada y la Inteligencia Artificial (IA), representan piezas claves para el futuro y ayudarán a cambiar el panorama de la medicina en los próximos dos años.
Por Jeff R. Livingstone.
Vicepresidente de atención médica de Unisys.
Muchas organizaciones médicas han pasado del modelo tradicional a un modelo de atención basado en el valor (VBC), en el que están incentivadas a brindar atención proactiva y coordinada en un esfuerzo por ofrecer mejores resultados a los pacientes.
En su esencia, el modelo VBC representa un cambio de mentalidad: desde pensar que el paciente es una persona que necesita tratamiento hasta pensar que es un cliente que compra un producto. Eso significa que crear una experiencia positiva para el usuario es más importante que nunca, aprovechar la tecnología innovadora para fortalecer este modelo, es clave no solo para brindar el servicio más efectivo posible, sino para brindar una experiencia óptima. Y en este aspecto, la tecnología disruptiva juega un papel importante, la Analítica e Inteligencia Artificial tienen un gran potencial para generar impactos positivos en la atención, los diagnósticos y la intervención médica.
Tal vez ninguna tecnología juega un papel tan crítico en el éxito de la VBC como la Analítica Avanzada de datos. Específicamente, los tableros interactivos ayudarán a las organizaciones a visualizar la eficacia de varios programas, filtrar información para identificar pacientes en riesgo y detectar patrones para ciertas afecciones.
El uso de la Inteligencia Artificial por parte de la salud está aún en su infancia. Un estudio reciente de la industria sugiere que solo una cuarta parte de los encuestados había logrado un resultado significativo con un programa piloto de IA. A pesar de esta baja aceptación, predecimos que pronto generará mejoras significativas en la oferta al paciente, en particular en los diagnósticos. Por ejemplo, la IA ya puede leer imágenes médicas mucho más rápido que los médicos. Esto conducirá a resultados más precisos.
En cuanto a los diagnósticos médicos, muchos procesos requieren muestras físicas recolectadas mediante biopsias invasivas, lo que conlleva ciertos riesgos. Sin embargo, en el próximo año podemos esperar que el reconocimiento de patrones, que toman la información, desempeñen un papel cada vez más importante. Esto significa que, en algunos casos, ya no serán necesarias las muestras de tejido, lo que evitará los procedimientos dolorosos y riesgosos.
La provisión médica a lugares remotos, tiene el potencial de ampliar enormemente el acceso y reducir los costos. A medida que los trabajadores de la información migran fuera de las ciudades, impulsan formas asequibles de acceder a la atención. Esto incentivará a más proveedores a adoptar tecnologías como parte de su oferta estándar en los próximos dos o tres años.
Aunque la mayoría de las personas piensan en la telesalud como una simple videollamada con un médico, las modernas tecnologías de IoT en combinación con las telecomunicaciones, pueden proporcionar una experiencia completamente diferente. Sin embargo, es importante tener presente los riesgos de seguridad y privacidad que pueden acompañarlas. Es de vital importancia trabajar con proveedores confiables, capaces de proteger a los pacientes y su información.
La experiencia del cliente es la clave para tener éxito en el futuro de la medicina. Aquellas organizaciones que aprovechen la Inteligencia Artificial y la Analítica Avanzada a su máximo potencial, serán las más adecuadas para ofrecer una experiencia perfecta a sus pacientes, al otorgarles un mayor control sobre su propia atención médica.