El ser humano es un “animal de costumbres”, que en su anhelo de superar sus condiciones lucha por mejorar su calidad de vida y la de su núcleo familiar, y en ese proceso intenta ofrecer refugio a sus seres queridos, haciéndose evidente el deseo de adquirir vivienda propia. En el argot popular se escucha que: “tener casa no es riqueza, pero no tenerla es pobreza”, y es allí, cuando los habitantes de Villavicencio buscamos en el espejo retrovisor, encontrando cientos de proyectos fallidos, pero existe uno que ha tardado 22 años, y que hoy, involucra a 230 personas que confiaron en un sueño que aún no se ha hecho realidad, es: “Bosques de Santa Ana”, un proyecto bastante ambicioso de casas campestres, conformado por 359 lotes de 12 metros de frente por 24 metros de fondo.
Villavicencio tuvo un auge en la construcción de viviendas bajo la administración del ex-alcalde Omar López Robayo, a quien se le conoce como el “precursor de la vivienda de interés social” en la Puerta al Llano, marcando un hito con la construcción de Multifamiliares Los Centauros, San Antonio y la Reliquia. Lo que representó una dinamización del mercado inmobiliario de la ciudad. En el 2002 se creó este proyecto de vivienda, que inicialmente, vinculó a 134 propietarios y que, tras el asesinato de Robayo, quedó congelado.
Teniendo en cuenta lo anterior, Periódico Llanoalmundo -Ll-, entrevistó a Alonso Garay -AG-, quien asumió su cargo el 3 de enero de 2024, como gerente de Piedemonte, la entidad que está a cargo de este proyecto. Él ha manifestado públicamente que desde su vinculación ha encontrado irregularidades acerca del manejo del mismo. Hay que recordar que durante el periodo del ex-alcalde Felipe Harman (2020-2023), se realizó un convenio para sanearlo y continuarlo.
LL: ¿Qué información encontró sobre el proyecto de vivienda “Bosques de Santa Ana”, una vez asumió el cargo?
AG: Sorprendentemente, no encontramos información clara. Es así que, tuvimos que realizar una investigación exhaustiva con todo el equipo de trabajo para poder establecer cómo se había dado esta alianza, y consolidarla para no salir en falso, sino contar con datos reales dado a que esta alianza no ha dejado nada positivo a la Administración. A la vez que, se ofició a los entes de control -Contraloría, Procuraduría, Personería, entre otros-, a nivel local, regional y nacional, quienes ya están informados, para que sean ellos los que tomen una decisión frente a este proyecto que involucra a Piedemonte. Debo resaltar que, el gerente saliente entregó un informe muy simple, no muy relevante y personalmente no hizo entrega del cargo, siendo él, el responsable de la firma de estas alianzas que no tenían los permisos necesarios. Adicional a que, se apropiaron de 96 lotes que fueron vendidos con promesas de compraventa firmadas por el aliado, sin que les correspondiera.
LL: ¿Qué tipo irregularidades encontró usted como gerente?
AG: Es importante dejar claro que, el 30 de diciembre de 2021 bajo la administración de Felipe Harman, se firmó el contrato No. 002 de 2021 cuyo objeto era: “Convenio específico de alianza estratégica de la para el desarrollo de la restructuración, rediseños, saneamiento jurídico, promoción, comercialización y ventas, construcción de las obras de urbanismo, y entrega de los productos inmobiliarios del condominio Bosques de Santa Ana, área suburbana de Villavicencio”, el cual tenía un periodo de ejecución inicial de 24 meses y en el cual de manera inusual, Oscar Osorio, gerente saliente de Piedemonte, actuaba como interventor y supervisor del contrato. El 16 de septiembre de 2022 se expidió la licencia de saneamiento por parte de la Curaduría Urbana Segunda para poder hacer la entrega formal de las áreas de cesión, legalizar la licencia urbanística y sacar la respectiva licencia de urbanización del proyecto. Este trámite se realizó por parte de Piedemonte para el respectivo proceso a desarrollar por el aliado estratégico, Ingeniería y Construcciones de la Orinoquía SAS cuyo Representante Legal es: David Leonardo Morales Galán. Desde la firma del contrato a la fecha, no existe ni fiducia conjunta, ni póliza, ni permiso de venta de los predios, ni permiso de captación de dineros, ni permisos ambientales, entre muchos otros requisitos exigidos por la ley, que no se han cumplido. Sumado a esto, el manejo del predio total del proyecto le fue entregado al aliado, por el gerente Osorio, generando una afectación directa a 134 personas que ya tienen escritura pública y no se les permite el ingreso a sus predios.
LL: ¿Cuál es el avance de este Convenio de Alianza?
AG: Con respecto de las licencias de construcción no han sido expedidas ni solicitadas por el aliado, hasta el momento no se han presentado los diseños arquitectónicos de las áreas comunes para su respectiva aprobación de diseño y presupuesto, y según se evidencia, estas obras se encuentran iniciadas sin sus respectivas aprobaciones, razón por la cual en este momento están suspendidas las actividades de obra. El proyecto no presenta avance significativo en la misma, generando una señal de alerta. De acuerdo con el informe presentado ante el Concejo Municipal el 30 de julio, el avance es del 21% de las obras de urbanismo.
LL: Teniendo en cuenta que el aliado no contaba con los permisos de captación de dinero y que entregaron promesas de compraventa de predios que nos les pertenecían a 96 familias, ¿Piedemonte está en la obligación de devolver esos dineros a quienes compraron de buena fe?
AG: Debo dar claridad frente a este tema que es muy delicado, y es que, Piedemonte no recaudó dinero, lo hizo el aliado a través de una cuenta de ellos, un valor aproximado de $18.000.000.000. En algunos casos el aliado recibió casas y carros en permutas, y lo más grave es que, esto constituye un delito por cuanto usó el nombre de Piedemonte en las promesas de compraventa, sin estar firmadas por el gerente sino por el contratista. Se generaron muchas irregularidades, pero eso no nos exime de la responsabilidad de reunirnos con la veeduría, de llamar al aliado para que responda, porque ese es el trabajo que hoy tenemos. Muchas personas han venido a pedirnos que les certifiquemos los $450.000.000 de pesos, porque necesitan declarar sus impuestos, pero nosotros no los podemos certificar. Le compete al aliado certificar la recepción de esos dineros y la generación de las facturas electrónicas correspondientes para que los compradores puedan declarar. Hoy, el dinero no lo tenemos nosotros, lo tiene el aliado y es lo que estamos exigiendo, que nos digan: ¿Dónde tienen esos recursos? El aliado no puede esperar que nosotros les dejemos seguir construyendo sin responderle a quienes hoy no saben dónde está su plata.
LL: Actualmente, ¿Qué tipo de relación sostiene como gerente de Piedemonte con el aliado Ingeniería y Construcciones de la Orinoquía SAS?
AG: En las reuniones que hemos establecido con el aliado, su representante legal, David Leonardo Morales Galán, nunca habla. Generalmente, lo acompañan un abogado y un arquitecto, cuando asiste, pero nunca toman decisiones, porque tienen que ir a consultar, no sé a quién. Esperamos que, en las próximas reuniones, el representante legal se presente y podamos llegar a algún acuerdo. Nosotros hemos requerido al contratista en constantes ocasiones para que rinda los informes financieros, que es lo que más nos importa ahora, nos han rendido algunos informes técnicos pero los financieros no. En la última reunión que sostuvimos con el aliado y la veeduría, ellos han indicado que no los hemos dejado avanzar en el proceso constructivo, que hemos parado las obras, a lo que le preguntamos, ¿Dónde está la plata? No nos dio respuesta. Y, concluyó que no volvía a reunirse con la veeduría, ni con nosotros, porque lo estábamos intimidando. ¿Intimidarlo es decirle que responda por los dineros que captaron de manera ilícita?
LL: A la fecha hay una serie de permisos y licencias vencidas, ¿Qué ha manifestado el contratista al respecto?
AG: Hoy en Piedemonte estamos haciendo el proceso de consolidación de las áreas de cesión, pero que nos digan que fue culpa de nosotros la venta de los 96 lotes y que no aparezcan los recursos. ¿Y, que en estos seis meses somos nosotros los que no les hemos dejado avanzar?, cuando era un elemento técnico y responsabilidad de la Administración saliente y del contratista entregar las áreas de cesión al municipio. Son muchas las anomalías, Cormacarena cerró la obra por no cumplir una serie de requerimientos ambientales. Ahora, lo que quiere el contratista es que todas las licencias estén al día y los dejemos seguir construyendo. Si en dos años y cinco meses no lo hicieron, y con toda esta serie de hallazgos, quieren que los dejen seguir, difícil. También encontramos que, a la fecha, se encuentran cuatro casas construidas, tres sin licencia y una con licencia, todas sin permiso de venta. Tampoco tienen licencia las construcciones de las zonas comunes (parques, piscinas, capilla, salón comunal y club house). Las obras fueron suspendidas por la inspección de Policía en abril del 2024. Y como si fuera poco, la licencia Urbanística de Saneamiento se encuentra vencida. Hoy, el proyecto no cuenta con los permisos ambientales renovados de captación de agua y de vertimiento de aguas residuales.
LL: Económicamente, ¿Cómo puede afectar el proyecto de vivienda “Bosques de Santa Ana” a Piedemonte?
AG: Actualmente, está en riesgo el capital y el patrimonio de Piedemonte, pues, no hemos recibido un peso. También somos víctimas del aliado. Hoy, las 96 personas que compraron están esperando que se les diga donde están los recursos porque está en riesgo, no solo el capital económico de esas familias, sino la confianza de las personas en lo público, y es que, es mi responsabilidad, velar porque Piedemonte tenga una estabilidad técnica, financiera y jurídica. Es responsabilidad del contratista y de quienes firmaron esos convenios responder por los dineros que captaron de manera ilegal.
LL: Finalmente, ¿Qué decirles a los 230 afectados que hacen parte de este proyecto, bien sea a quienes ya cuentan con escritura y a los que tienen la promesa de compraventa expedida por el aliado?
AG: Que vamos a seguir avanzando para garantizar la transparencia en los procesos de Piedemonte. Igualmente, destacar que el alcalde Alexander Baquero está comprometido con que se aclaren los hechos, para dar tranquilidad a los que han intervenido en este proceso. A los 134 que tienen su escritura, los invitamos a participar de la convocatoria que realizará Piedemonte en los próximos días, para organizar la asamblea de propietarios; y a los 96, que realizaremos las gestiones jurídicas pertinentes para que el aliado responda ante las autoridades competentes frente a los recaudos realizados, dineros que están en manos del contratista Ingeniería y Construcciones de la Orinoquía SAS. También decirles, que hoy sabemos que contamos con el respaldo del Concejo Municipal de Villavicencio, ya que ellos en su compromiso con la ciudadanía, despejaron la dudas que existían con respecto del proyecto de vivienda “Bosques de Santa Ana”, y ya han manifestado su interés en que se aclaren todas las dudas con respecto al mismo.
