El papa León XIV advirtió sobre el fuerte aumento de los juegos de azar y los calificó como una “plaga” que está arruinando a numerosas familias, durante una audiencia en el Vaticano con la Asociación Nacional de Municipios Italianos, en la que llamó a las autoridades locales a enfrentar este fenómeno desde una perspectiva social y humana.
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En su intervención ante alcaldes y alcaldesas de toda Italia, el Pontífice expresó su preocupación por el crecimiento de los juegos de apuestas en los últimos años, señalando que las estadísticas confirman una expansión alarmante de esta práctica. León XIV aseguró que el auge del juego no solo afecta la economía familiar, sino que también está vinculado a problemas de marginalidad, violencia y soledad que se manifiestan con fuerza en las ciudades.
El Papa citó el informe anual de Cáritas para subrayar que el juego de azar constituye un grave problema educativo, de salud mental y de confianza social. En ese sentido, describió la ludopatía como una de las formas más visibles de la soledad contemporánea, e instó a las administraciones públicas a asumir un papel activo en la prevención y atención de este fenómeno que golpea especialmente a los sectores más vulnerables.
Durante su mensaje, León XIV también llamó la atención sobre otros males que afectan a la vida urbana, como la depresión, la pobreza cultural y espiritual, el abandono social y el “grito silencioso” de los pobres. Al dirigirse a los dirigentes municipales, los exhortó a promover relaciones auténticamente humanas y a escuchar a los más débiles para fortalecer la cohesión social y la democracia, recordando que la política debe ofrecer esperanza y trabajar por un futuro más justo para las comunidades.
