Contribuir a la conectividad ecológica y mejorar los servicios ecosistémicos, es el principal objetivo del acuerdo de conservación que suscribió la gobernadora del Meta, Rafaela Cortés Zambrano, con Cormacarena y los alcaldes de El Dorado y El Castillo, para proteger 608 hectáreas de bosque natural en áreas estratégicas de estos dos municipios.
Estos acuerdos se firmaron, mediante el programa de ‘Pagos por Servicios Ambientales’ (PSA), con 31 familias de El Castillo para la conservación de 244 hectáreas, y con 65 familias de El Dorado para la conservación 364 hectáreas, por un valor anual de $403 millones.
Los (PSA) son una herramienta fundamental que reconoce y recompensa a los propietarios u ocupantes de buena fe por su labor en la conservación del bosque nativo; este programa también tiene un enfoque inclusivo, beneficiando a familias que provienen de procesos de restitución de tierras y aquellas incluidas en la estrategia ZARP, garantizando así que las iniciativas ambientales también apoyen a las víctimas del conflicto armado y especialmente a mujeres que representan el 31por ciento.
“El Gobierno departamental está comprometido, para tener un lugar especial de conservación, de tal modo que podamos tener los conectores sistémicos que favorezcan tanto la flora como a la fauna, y seguir afianzando la protección y conservación de áreas con alto valor ambiental”, afirmó, Martha Sirley Romero Morales, secretaria de Ambiente del Meta.
Estos acuerdos están basados en el fortalecimiento de proyectos o prácticas sostenibles, que aporten al ordenamiento ambiental del territorio, contribuyendo a las economías locales, a través del aprovechamiento sostenible de la biodiversidad y la identificación de aspectos que mejoran las condiciones de vida y bienestar de estas comunidades.
/Gobernación del Meta
