Una comisión liderada por el alcalde, Wilmar Barbosa Rozo, y el director de la Oficina de Gestión del Riesgo, Juan Carlos Guzmán, visitó la vereda Mi Llanito la cual hace unos días fue afectada en cuatro puntos diferentes por el desbordamiento del Caño Espejo. La fuerza de la naturaleza arrasó con cultivos de yuca, plátano y algunos cítricos.
Además, la fuerza del río dejó prácticamente incomunicada a esta zona rural con el casco urbano de Villavicencio. Ante dicha situación, y tras la visita del mandatario local, el Gobierno Municipal construirá una estructura de redireccionamiento que permitirá centrar el afluente y realizar dos canales para recuperar la carretera de acceso a la vereda.
Los trabajos, que cuentan con el apoyo de la Gobernación del Meta, ya iniciaron a través de tres excavadoras orugas, dos dobletroques y volquetas. Por su parte, María Pasión González, habitante del sector, reconoció la preocupación del mandatario municipal por apersonarse de la emergencia y ofrecerle soluciones inmediatas a las más de 80 familias que residen en la vereda, entre las que se encuentra, la puesta en servicio de un tractor para transportar los alimentos que se producen y posteriormente se comercializan en la ciudad.
/Alcaldía de Villavicencio