“Abrir la puerta, y tocar la campana, me permitió ver la luz al final del túnel.”
Así, resumió la finalización de su duro tratamiento contra el cáncer el reconocido periodista regional César Augusto Monsalve Castellanos. Una frase que describe lo que experimentó el pasado 28 de febrero, cuando aún débil, por los efectos de lo que fue su última radioterapia, abrió la puerta que lo exportaba al momento más esperado desde que había iniciado su tratamiento contra el cáncer, el toque de la campana, un acto que simboliza la superación de la enfermedad. Un momento ambientado con unas pocas bombas, y una calle de honor amenizada por los aplausos de sus enfermeras, personal médico y el resto de los pacientes que siguen esperando reproducir ese sonido con sus propias manos, para retomar sus vidas. Su esposa e hijo filmaron ese hermoso instante.
Dos campanazos
“Cada vez que entras a una radio o una quimioterapia ves la campana ahí y te preguntas: ¿Cuándo la tocaré? Uno no cree que sea verdad, que has superado la enfermedad, porque aún te sientes enfermo en ese momento”, explicó el reconocido periodista. Para él, el primer campanazo sobre su salud fue en plena pandemia cuando le dio Covid-19. “A mí me sucedieron dos cosas, primero, el COVID me dio muy duro, no podía respirar, estuve a punto de ir a una UCI, pero bueno, Dios me dio otra oportunidad y pude salir adelante”, anotó. El segundo suceso pasó a mediados de diciembre de 2021, cuando luego de su tercera dosis de vacuna anticovid presentó en el cuello una especie de tumor que terminó siendo una masa cancerígena, dando por confirmado en junio del 2022, después de muchos análisis, la presencia de cáncer en su cuerpo.
“Según los especialistas u oncólogos lo que hizo la vacuna fue visibilizar a tiempo, una enfermedad que yo tenía, y como uno no se hace medicina preventiva, no sabe que está enfermo, el cáncer es una enfermedad silenciosa, cuando duele es porque está avanzado, y ya no hay mucho que hacer”, explicó Monsalve Castellanos. “Terminé con una cirugía, me hicieron un vaciamiento de ganglios, pero ya me había afectado la amígdala y se estaba extendiendo, por eso debí entrar en tratamiento”, agregó.
La película de la vida
César Augusto Monsalve Castellanos más conocido como “Chiva Loca”, es un Comunicador Social y Periodista de 57 años, egresado en el año 1989 de la Universidad de la Sabana en Bogotá. Su núcleo familiar está conformado por su hijo, y su esposa. Nació en Bogotá, hijo de padres santandereanos, es el segundo hijo (único varón), de cuatro hermanos.
La presencia del cáncer dividió su vida en dos, un antes y un después, el tiempo del tratamiento le permitió regresar la película de su vida, y hacer un balance de las cosas que había logrado, y de lo que le falta por vivir, recordó la propuesta del reconocido periodista y director de programas radiales como ‘La Tertulia’ y ‘Cultura RCN’, Juan Manuel Ruiz, quien en la época universitaria lo había invitado a realizar las prácticas profesionales en RCN Radio.
Una oferta que terminó rechazando por una frustración que le había generado, uno de sus docentes de radio, el destacado periodista Néstor Morales, quien le había dicho que no era apto para hacer radio, que lo suyo era escribir. Luego de varias solicitudes a medios reconocidos de la época, terminó realizando prácticas en La Prensa, diario conservador de la Familia Pastrana, cubriendo la sección de deportes, y teniendo como jefe a Germán Arango, importante periodista deportivo en medios como: Noticias Uno, Cablenoticias y Noticiero CM&. “No cubría fútbol porque era solo para los expertos, entonces aprendí de muchos deportes que uno cree que sabe, pero no sabe nada, entonces me tocaba cubrir golf, automovilismo, ciclismo, de eso empecé a escribir notas”, explicó el periodista.
Tuvo la oportunidad de cubrir un mundial de ajedrez realizado en Tunja, Boyacá, en compañía de Alonso Zapata Ramírez, Gran Maestro Internacional colombiano de ajedrez, catalogado rey de este deporte. Solo hizo notas de ambientación del momento, porque no se interesó mucho por aprender los recuadros técnicos. Allí, se volvió un experto en realizar crónicas deportivas. Germán Arango, Fernando Araujo Vélez, y César Augusto Londoño, todos íconos del cubrimiento deportivo en el país, se idearon “Después del Adiós”, que consistía en buscar viejas glorias del deporte colombiano y entrevistarlos para saber que estaban haciendo en su presente. Entrevistó a personajes como: Arturo Segovia, Alejandro Brand, Willington Ortiz, y Jorge Combariza. “Con esta sección nos ganamos un premio nacional de periodismo, fuimos con Germán a recibir la estatuilla y un diploma”, anotó Monsalve Castellanos.
Un largo recorrido ha tenido en su trasegar como periodista, desde su trabajo luego en la sección de Nacionales, al lado de Gonzalo Guillén, hasta su amistad cercana con Luis Carlos Galán, personaje con el que realizó su primera entrevista, y a quien el día de su asesinato, en medio de su dolor, le escribió la reconocida crónica “Tras el Rastro de Galán, 90 minutos de Incertidumbre” para las dos páginas centrales del diario La Prensa. Por ello, sus compañeros le decían “Galanista”.
En el año 1996, aterrizó en Villavicencio de la mano de su amigo Jairo Chacón, creando el periódico El Llanero que duró un año en circulación, y se quebró. Posteriormente, se radicó en la Capital del Meta, luego de renunciar en Radio Santa Fe en Bogotá, para trabajar en emisoras como: 98.3, Eco Llanero, Marandúa Stéreo, Radio Macarena, Caracol Radio, entre otras. Fue asesor de despacho y jefe de prensa de las administraciones de Omar López Robayo, y de Franklin Germán Chaparro, en Villavicencio. También fue reportero de los Llanos Orientales para Caracol Televisión. Actualmente es el director del Noticiero Hora 20 de Caracol Radio.
Esta es parte de la película de la vida de este reconocido periodista que hoy agradece a Dios esta segunda oportunidad de vida. “Empecé a trabajar en Villavicencio por un mes, y aquí estoy, me quedó gustando el llano, tomé agua del Guatiquía, y me quedé….”, indicó, entre sonrisas el reconocido periodista.