Se llevó a cabo la valoración médica nutricional y biológica de un oso palmero u hormiguero macho nacido en el Bioparque Los Ocarros, es la segunda cría de una pareja que por sus condiciones de salud y comportamiento no pudieron ser liberados en su hábitat natural, y hoy hacen parte del plan de colección de este lugar comprometido con la preservación, rehabilitación y conservación.
Según Diana Varón, coordinadora de la unidad de biología de Los Ocarros, su peso es de 1.190 gramos; con un registro de talla 60 centímetros, y el largo de su cráneo alcanza los 13 centímetros. “Es un animal aparentemente sano, con temperamento nervioso y actitud alerta. Condición corporal idónea para su estado de desarrollo biológico”, dijo la especialista.
La importancia ecológica de estos animales es controlar plagas como hormigas y termitas en los cultivos, puesto que son su alimentación diaria. La especie llega con mayor afluencia a este santuario ecológico debido a causas entre las que se encuentran el atropellamiento vial y las entregas voluntarias. Pueden llegar a medir de 1,20 hasta 1,80 metros de largo, y pesar alrededor de 40 kilogramos.
Se espera prepararlo para ser liberado más adelante en su hábitat natural. De esta forma se contribuye en la conservación de la especie, que se define en estado vulnerable.
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