Una alianza entre el Estado y los campesinos de la región de Arauca dedicados al cultivo, especialmente, del cacao, propuso el presidente Gustavo Petro para hacer efectiva la transformación del territorio.
Durante el Encuentro Territorial Economías para la Vida, que se realizó en el municipio de Arauquita, Arauca, el mandatario explicó cuáles son los compromisos que deben hacerse efectivos tanto de parte del Estado como de los pequeños cacaoteros.
“Es claro que transformar una región no se hace la noche a la mañana, y quienes deben hacer esa transformación del territorio es la ciudadanía, para que sea la gente la dueña del territorio”, aseguró.
Para el jefe de Estado, este proceso comienza con un diálogo territorial entre los propios campesinos que han descubierto que el cacao de Arauca podría estar entre los mejores del mundo, porque es aromático, es rentable, produce riqueza, por tanto, mejores condiciones de vida.
Sin embargo, dijo que hay que superar un primer problema: cómo reducir la presencia de cadmio –metal pesado y tóxico- en la tierra por el cultivo del cacao. “Deberíamos hacer estudios de suelo, Ministra de Agricultura, por favor, y entonces saber en dónde hay más cadmio”, dijo.
Este es un tema donde el Gobierno debe ayudar “porque un campesino solo no va a descubrir la química, de eso tiene que ser en una universidad, que podría ser en Saravena, Arauca.
“Aquí tenemos un primer compromiso: reducir el cadmio de la tierra es un tema técnico, hay que hacerlo y rápido, y eso vale un billete, y esa inversión tiene que expresarse en un proyecto, y ese proyecto no se lo podemos delegar al productor directo. Lo tiene que hacer el Gobierno. Es una división del trabajo, ustedes hacen unas cosas nosotros otras”, insistió.
Para la industrialización del cacao, que sería el siguiente paso, es necesaria la asociatividad de los campesinos para entrar a industrializar no solo el cacao, sino la leche el plátano, etc.
El Jefe de Estado planteó varias alternativas de modelo económico: el capitalista, donde la fábrica es de un solo dueño y el campesino trabaja y recibe un sueldo; el modelo socialista que fracasó; el modelo estatal, donde la fábrica es del Estado que pone la plata, o el modelo de la asociación campesina que le da fuerza al cacaotero.
“Como eso hay que industrializarlo, no se puede hacer en cada parcela en cada finca, entonces hay que asociarse, pero en lugar de que sea un gran capitalista al dueño, primer modelo, o que sea el Estado el dueño, segundo modelo, tendrían que ser ustedes los dueños, lo cual implica que la organización fuerte”, explicó.
¿Y quién pone la plata?
Sobre el tema económico dijo que “poner una factoría no nace por el Espíritu Santo”, entonces sugirió que la plata la ponga el Banco Agrario y los campesinos paguen como un crédito con la producción durante los años que siguen y al final la factoría quede en manos de ellos.
“Pero hay que asumir los riesgos si se quiere vivir mejor: si la procesadora en una primera etapa vale $15 mil millones, el Banco Agrario tiene que comprometerse a poner esos recursos y ustedes se comprometen a tener una organización fuerte. Si lo hacemos bien, tendremos riqueza en la región”, consideró.
Luego vienen nuevos problemas: el conocimiento sobre el plátano, el cacao, la leche, el agua, etc., y para ello se necesita la universidad. “No son ustedes los que tienen que responder por hacer una universidad en la región, es el Gobierno, y eso implica no decir ‘voy a hacer una universidad’, pues esa costumbre política nuestra hay que cambiarla, sino aquí está el estudio arquitectónico para hacer la universidad y aquí está la plata; ahí sí podemos decir que se va a hacer la universidad de Saravena, porque aquí se cruzan tres departamentos: Norte de Santander Boyacá y Arauca”, señaló el mandatario.
Y para garantizar las exportaciones del cacao y demás productos agrícolas es necesario tener vías, bien sea carreteras o ferrocarril. “La vía Libertadores – La Soberanía se mete al Norte de Santander, va a Bucaramanga, se mete hacia el Magdalena Medio y queda más cerca a la troncal que va hacia Santa Marta. Es la manera de juntar Arauca con la Venezuela cerca al mar por el Lago de Maracaibo”, explicó.
En conclusión, el presidente Petro recordó que los compromisos son: “el Gobierno tiene que facilitar el crédito subsidiado con el Banco Agrario a bajo interés; tiene que aparecer la universidad, tiene que aparecer el dinero de la carretera; tiene que aparecer la asistencia técnica de ayuda al campesinado, y ustedes los productores y productoras ofrecen su asociatividad, sus saberes y su trabajo. Juntemos nuestras fuerzas para transformar la región, es decir hacemos una asociación para construir la paz”.
/Presidencia de la República