El Congreso aprobó la conciliación del polémico proyecto de Ley de Seguridad Ciudadana. En un mes y cinco días el Legislativo aprobó un documento que pretende, entre otras cosas, modificar el Código Penal. En la plenaria 60 senadores aprobaron el texto, 10 se negaron a conciliar y 3 más se abstuvieron. Al proyecto le resta la firma del presidente para ser ley.
En total las plenarias de la Cámara y Senado lograron conciliar 22 de los 68 artículos que traía este proyecto de ley. Con la aprobación de esta iniciativa legislativa culminan las labores en el Congreso, los legisladores habían sido llamados a sesiones extraordinarias para aprobar este articulado que tenía el calificativo de “urgente” por parte del presidente Iván Duque.
Los autores del proyecto que pretenden mejorar la seguridad ciudadana fueron los ministerios de Defensa, Interior y Justicia.
El ministro de Defensa Diego Molano, dijo que el articulado versa sobre cuatro cuestiones: castigo a la reincidencia, el agravante cuando se usa arma blanca o traumática en la comisión de delitos, el endurecimiento en el castigo cuando se ataca a funcionarios públicos como la Policía y la máxima pena para los asesinos de líderes sociales.
El artículo 3 de esta ley es el de mayor discordia. En él se habla del concepto de “legítima defensa privilegiada”. Para el articulado será legítima defensa el responder ante la presencia de extraños en una propiedad privada.
Dice textualmente la ley que no habrá lugar a responsabilidad penal “cuando la legítima defensa se ejerza para rechazar al extraño que usando maniobras que superen las barreras de la propiedad o mediante violencia penetre o permanezca arbitrariamente en habitación o dependencias inmediatas, propiedad comercial cerrada al público o vehículo ocupado”.
Seguido, la Ley de Seguridad Ciudadana habla que en estos casos se podrá usar la fuerza letal “de forma excepcional para repeler la agresión al derecho propio o ajeno”.