El defensor del Pueblo en el Meta, Jorhman Saldaña, reveló que el 18 de noviembre les incineraron 5 vehículos del esquema de seguridad a los excombatientes que estaban concentrados en los Llanos de El Yarí, municipio de La Macarena. Los escoltas de la Unidad Nacional de Protección fueron despojados de sus armas, pero no hubo personas heridas.
Fue esta la razón por la que la Agencia de Reincorporación y Normalización (ARN) intervino para que pudieran trasladarse a una finca en Caquetá.
En materia de derechos humanos, el sur del Meta sigue siendo el escenario más complicado con amenazas a los líderes sociales, a los reincorporados, a las personas firmantes del proceso de paz, reclutamiento disfrazado de ofertas de trabajo por cuenta de varios grupos al margen de la ley que no tienen un líder visible, y extorsión disfrazada de ayudas sociales.
La Macarena, Vista Hermosa, Uribe y Puerto Rico son los municipios más afectados.
Algunos de estos fenómenos ocurren en parques nacionales donde el Estado difícilmente les puede ayudar a las comunidades rurales.