La situación es alarmante: tres de cada diez niñas, niños y adolescentes, entre los 5 y los 19 años, viven con sobrepeso en América Latina, según el más reciente informe de Unicef sobre la obesidad infantil en la región. Esta condición, que cada vez ocupa un lugar más relevante, se suma a otro problema que ya golpeaba a esta parte del mundo: la desnutrición crónica y la deficiencia de micronutrientes.
El sobrepeso y la obesidad en Colombia vienen en aumento, así como las enfermedades derivadas de los kilos de más. La pandemia, ha abierto aún más la ventana para perder el control en hábitos alimenticios y rutinas de ejercicios.
Para no llegar a una opción tan drástica como es una cirugía de reducción del estómago, los especialistas en nutrición recomiendan a los padres de familia trabajar más en la prevención con los niños.
No dejarlos comer todo lo que quieran, mantener los horarios y los espacios de comida. Se hace énfasis que cuando se acostumbra a tomar sus alimentos en el cuarto, en la sala o en el mismo sitio de estudio y trabajo, se facilita comer más.
Aunque no existen cifras tan recientes del sobrepeso y la obesidad en Colombia, la última encuesta, que data del año 2015, revela que el 56,5 % de colombianos entre 18 y 64 años tiene exceso de peso, y una de cada cinco personas tiene obesidad.
Así se desprende de la Encuesta Nacional de Situación Nutricional -Ensin- herramienta que se aplica cada cinco años para medir los problemas nutricionales de la población colombiana y tomar medidas públicas. Por cuestiones derivada de la pandemia, el estudio correspondiente a 2020 fue aplazado, lo cual no le permite al país contar con indicadores actualizados, que, en la opinión de los expertos, podrían mostrar un panorama aún más preocupante.
Según esta encuesta la obesidad es más frecuente en las mujeres (22,4 %) que en los hombres (14,4 %). Por regiones, esta herramienta de medición muestra que, en Colombia es la Orinoquía y Amazonía (21,8 %), seguida por el Pacifico (21,0 %) y la zona Atlántica (19,9 %) en donde se presenta el mayor número de personas con obesidad.
También, en esta encuesta se devela que el exceso de peso en los menores en edad escolar se incrementó de 18,8 % en 2010 a 24,4 % en 2015. El tiempo excesivo frente a pantallas, aquel dedicado a actividades sedentarias como ver TV o jugar con videojuegos, afecta a siete de cada diez escolares de áreas urbanas, frente a cinco de cada diez de zonas rurales.
Para Henry Tovar Cortés, presidente de la Asociación Colombiana de Endocrinología, Diabetes y metabolismo, el país no cuenta con estadísticas actualizadas de sobrepeso y obesidad, los datos de Ensin son de hace seis años y son alarmantes, pues mostró que más de la mitad de los colombianos tienen problemas con su peso.
Lo más probable según el representante de esta Asociación es que esta cifra haya aumentado, especialmente en obesidad por datos de escolares y adolescentes. Se está a la espera de la nueva encuesta, que ya no sería 2020-2025, sino 2021-2026, la cual serviría para tener un diagnóstico más concreto y analizar qué ha pasado y por qué el incremento de peso entre los colombianos.
El Ministerio de Salud y Protección Social señaló que en la línea de gestión del conocimiento se trabaja en la Encuesta de la Situación Alimentaria y Nutricional -ENSIN-, actualmente. Se está formulando su cuarta versión, en la cual se pueden conocer los determinantes sociales, singulares, intermedios y estructurales que se relacionan con el sobrepeso y la obesidad en el país. Igualmente, se trabaja en otras fuentes secundarias de información como los sistemas de vigilancia y la agenda de investigación en alimentación saludable.
El sobrepeso y la obesidad no solo son problemas que preocupan a Colombia sino a muchos países del mundo. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud -OMS- desde 1975, la obesidad se ha casi triplicado en todo el mundo, alcanzando proporciones epidémicas.
En 2016, más de 1.900 millones adultos de 18 o más años tenían sobrepeso, de los cuales, más de 650 millones eran obesos. Y lo más preocupante es que según las estimaciones de la OMS unos 41 millones de niños menores de cinco años tenían sobrepeso o eran obesos.
“Si bien el sobrepeso y la obesidad se consideraban antes un problema propio de los países de ingresos altos, actualmente ambos trastornos aumentan en los países de ingresos bajos y medianos, en particular en los entornos urbanos. En África, el número de menores de 5 años con sobrepeso ha aumentado cerca de un 50 % desde el año 2000. En 2016, cerca de la mitad de los niños menores de cinco años con sobrepeso u obesidad vivían en Asia”, anota el informe de esta organización.
Los endocrinólogos y nutricionistas afirman que el exceso de peso y la obesidad no son solo problemas estéticos, sino que también tienen gran impacto en la salud de las personas, y son ventanas para más de 30 enfermedades crónicas, convirtiéndose en un verdadero problema de salud pública.
Según la endocrinóloga y médica internista de la Universidad de El Bosque, Ariana Sierra Osorio, el sobrepeso y la obesidad se incrementa en Colombia por cuenta de los estilos de vida actuales, “el tiempo frente a las pantallas, en especial en nuestros niños y adolescentes ha aumentado significativamente, el 62 % ven TV o juegan videojuegos por más de 2 horas al día, en especial entre quienes viven en áreas urbanas”.
Para esta especialista del hospital San José de Bogotá de la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud -Fucs- la población cada vez es más sedentaria, se le dedica menos tiempo a realizar actividad física (menor uso de bicicleta o caminatas como medio de transporte, mayor uso de ascensores etc.) y se consume mayor cantidad de alimentos procesados, azucares, harinas (carbohidratos) y alimentos ricos en grasas saturadas, menor ingesta de frutas y verduras, carbohidratos complejos y alimentos ricos en fibra.
Influye también el contar con menos tiempo para la preparación de alimentos, lo cual favorece el consumo de alimentos fuera de casa que en gran porcentaje son poco saludables, como las comidas rápidas y otras alternativas con un escaso valor nutricional.
Otro de los factores, según la endocrinóloga Sierra quien hace parte del Grupo Multidisciplinario para el Abordaje de Pacientes con Obesidad es que “Muchas personas cometen errores en la autopercepción de su peso, dos de cada 5 jóvenes o adultos con exceso de peso consideran que tienen peso normal o se perciben delgados, lo cual motiva a tener inadecuados hábitos nutricionales”.
La recomendación que se hace en caso de empezar con un incremento de peso siempre es acudir al médico quien determinará la ruta multidisciplinaria a seguir para evitar que los indicadores se salgan de control.
“Invito a todos las personas que tengan alteraciones de su peso, a consultar a su médico, para brindarle un manejo integral. Siempre será un grupo de profesionales de la salud quien brindará apoyo al paciente en este proceso, endocrinología, psicología o psiquiatría, nutrición, medicina del deporte entre otras especialidades”, señala la endocrinóloga Ariana Sierra.
También advierte la especialista que es necesario realizar una evaluación detallada de posibles causas de la ganancia de peso y qué riesgos puede generar su estado de salud. ”El enfoque terapéutico no debe ser solo basado en la pérdida de peso, debemos ayudar al paciente a mejorar su calidad de vida y autoestima, que logre un nivel superior de energía, mejoría de la salud general y prevención del aumento de peso adicional”.
Una dieta adecuada, una rutina de ejercicio guiada por expertos y un acompañamiento psicosocial ayudan a controlar la enfermedad. Sin embargo,la clave está en no dejarse ganar ventaja, por lo que la prevención del sobrepeso y la obesidad es la mejor estrategia para estar tranquilos y llevar siempre una vida sana.
La responsabilidad para mantenernos a raya es de todos, pero las políticas públicas facilitan que desde la escuela y el hogar se prevenga la aparición de la acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud, tal y como define la OMS el sobrepeso y la obesidad. Diferentes actores como medios de comunicación y redes sociales cada vez más se comprometen con la prevención de estos dos enemigos de una vida saludable.
“Debemos promover estilos de vida saludables, en los escenarios posibles, tanto en hogares, como en colegios, debemos aprovechar los medios de comunicación y las redes para educar de forma sencilla acerca de cómo lograr una alimentación balanceada y cómo mantener una actividad física regular. Los cambios alimentarios deben estar enfocados en consumir alimentos de alto valor nutricional, disminuir la ingesta calórica, mejorar los patrones de alimentación y reducir el tamaño de las porciones. En cuanto a actividad física se aconseja realizar por lo menos 150 minutos de actividad moderada a la semana o 10.000 pasos al día”, advierte la endocrinóloga Sierra.
¿Y cómo saber si se está con sobrepeso? Existen diversas herramientas para guiarse y tener las cuentas claras. A simple vista cuando la ropa empieza a ceñir y la báscula muestra el peso real, es el primer indicador. Sin embargo, es clave saber cuál es el Índice de Masa Corporal -IMC-, un número calculado a partir del peso y la estatura. “No es un cálculo preciso del porcentaje de grasa corporal, pero es una forma fácil de determinar dónde se encuentra su peso en el rango de saludable a no saludable”, así lo describen en ‘La verdad de su peso’ un sitio web especializado que sirve como herramienta para orientar a personas con sobrepeso.